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El programa tuvo como objetivo capacitar a las usuarias en modelos de negocio a través del Lienzo Canvas y la creación de una tienda en plataformas digitales, entre otros. Esto, como parte del objetivo de la fundación de enfrentar la brecha digital.

Durante marzo de este año se llevó a cabo el cierre del programa “Emprendedoras Conectadas” en alianza con Fundación Kodea, dónde 33 emprendedoras de la fundación se capacitaron digitalmente para crear una tienda online en plataformas como Instagram, WhatsApp Business o Facebook.

El grupo, con un promedio de 51 años, estaba compuesto por 33 mujeres de las comunas de Pedro Aguirre Cerda y La Pintana, pertenecientes a los bancos comunitarios “Emprendedoras” y “ Juntos Crecemos” respectivamente.

Una vez finalizado el curso, 26 de las emprendedoras que cumplieron los objetivos, recibieron un capital semilla de 350 mil pesos con el fin de continuar desarrollando sus emprendimientos.

Cecilia Stehr, directora ejecutiva de la Fundación, destaca la importancia tanto a nivel personal como económico que tienen programas como este o similares que apuntan a disminuir la brecha digital: “La digitalización cumple un rol fundamental por la importancia del desarrollo de las competencias digitales que facilita aprendizaje, comprensión, pensamiento crítico, comunicación y, por supuesto, el acceso a la información y trámites en línea disponibles”.

Contra la brecha digital

Los contenidos del programa se dividieron en 7 módulos distribuidos en 11 clases grupales, además de dos a tres tutorías personalizadas según el grado de brecha digital de la emprendedora. Entre los temas abordados durante la capacitación destaca el desarrollo de su modelo de negocio a través del Lienzo Canvas, el uso de smartphones como herramienta de trabajo, la creación de marca y logo con la app de Canva, educación financiera y el uso de plataformas sociales para potenciar ventas y atraer clientes.

Sin embargo, durante la aplicación del programa se identificaron ciertas dificultades y desafíos, siendo la brecha digital la más importante de ellas. En esta línea, Karen Ahumada, trabajadora social de la fundación y quien junto a Raúl Astudillo fueron los Instructores Digitales encargados de capacitarse con Fundación Kodea, para posteriormente capacitar a las usuarias, asegura: “El principal desafío a la hora de implementar el programa fue, efectivamente, la brecha digital, en cuanto al poco conocimiento del uso básico del teléfono y aplicaciones, entre otros”.

A pesar de este factor, el programa logró que el 85% de las emprendedoras adquirieran un grado importante de habilidades digitales gracias a las cuales crearon sus negocios digitales. Además, aprendieron a crear un catálogo, subir publicaciones y contestar mensajes por la sección de mensajes de la red social.

Por otro lado, agrega la trabajadora social, el programa fue mejor recibido por emprendedoras jóvenes y alfabetizadas digitalmente: “Contaban con conocimientos digitales dentro de una generación que nació con esta tecnología, lo que simplificó el desarrollo del programa, en ese sentido, para ellas fue un aporte poder profundizar sus conocimientos, por ejemplo, mediante la creación de un logo en la aplicación Canva, e incorporar mayor y mejor contenido a sus plataformas”.

Confianza y empoderamiento: las ideas fuerzas del programa

A modo de conclusión, el informe final realizado por los Instructores Digitales asegura que la instancia fue capaz de inculcar habilidades digitales básicas en las usuarias y las “ideas fuerzas” proporcionadas por Kodea fueron claves para motivar a las emprendedoras y superar barreras psicológicas o motrices en el aprendizaje digital.

En este sentido, los espacios de conversación y distensión, como lo son los desayunos y onces organizados por las usuarias en sus reuniones en el banco comunitario, se convirtieron en un espacio para compartir en comunidad complementario a las sesiones lectivas, facilitando la confianza con los Instructores Digitales.

Asimismo, el informe recomienda continuar utilizando herramientas motivacionales como las “ideas fuerzas” para fomentar la confianza y el empoderamiento digital de las participantes.

Además, el documento recomienda explorar estrategias adicionales para abordar la brecha digital y mejorar el acceso equitativo a la tecnología como, por ejemplo, las tutorías personalizadas en nivelación de habilidades digitales.

Karen agrega que es importante considerar las brechas que existen entre las mismas usuarias: “No todos los grupos son iguales, y hay que buscar un término medio para que quienes estén más atrasadas aprendan y puedan avanzar con las emprendedoras que son nativas digitales”. Más allá de eso, agrega, “la venta por internet no es rápida y no es inmediata, por lo que siempre se les sugiere a las usuarias ser constantes en subir contenido, responder mensajes y en aplicar estrategias para que su oferta sea más atractiva en las plataformas digitales para el consumidor, por lo tanto, las expectativas también deben centrarse ahí”.

A futuro, Fundación Crecer planea repetir este programa e ir incorporando modificaciones acordes a las necesidades de las emprendedoras. “Queremos repetir el programa, pero queremos ajustarlo a la realidad de cada grupo de usuarias, lo que implica, si es necesario, partir desde lo más básico para que puedan aprovecharlo al máximo y ponerlo en práctica”, concluye la Instructora Digital.